EPITAFIO (nobody´s perfect)

De por sí lo más complicado para mí es la storyline de una historia. Resumir nunca fue una tarea fácil para quien les escribe; soy más bien de esos que se atascan, que pierden demasiado tiempo escribiéndolas para luego desecharlas y terminar escribiendo ¡NADA!.  Ahora, por estos días del 2013 estoy salteándome ese paso, sintiéndome más cómodo al escribir los personajes y el argumento; sí, me gusta poder explayarme con la mayor cantidad de palabras posibles (muy dentro de mí hay un novelista fracasado). Pero bueno, tarde o temprano para poder vender una de mis historias voy a tener que armar mi speech, mi storyline para convencer a aquellos que tienen el dinero de invertirlo en mi obra. Y ahí voy a estar complicado, pero por suerte hoy tengo tiempo para dedicarle. El problema verdadero se me va a presentar cuando sepa que me estoy muriendo (extraño caso que puede suceder por vejez o por algún motivo X antes de los 60). Problema no porque esté dejando el mundo y mis seres queridos (si es que aún tengo) estén sufriendo a mi lado, sino porque voy a estar más concentrado en escribir un epitafio que me caracterice que en el tratamiento de una supuesta enfermedad o en el cuidado de mi cuerpo. No sería posible, en el peor de los casos, disfrutar esos últimos días de mi vida. Intuyo que probablemente me pasaría lo mismo que el protagonista de Synecdoche New York; que la agonía sea eterna y el epitafio nunca se termine de escribir. Sí, es más que sabido que ni en el último segundo voy a estar conforme con esa frase de tumba, pero al menos sabré en ese momento que esa línea final se trabajó cada día de mi vida. Un psicótico de la brevedad. Tengo la fortuna de que una vez, un profesor de guión me haya abierto los ojos y puesto ante las maravillosas películas de Billy Wilder. La mayoría de los que estéis leyendo este post seguro recordarán SOME LIKE IT HOT (“Con faldas y a lo loco” o “Una  Eva y dos Adanes”). Y si se acuerdan del film no pueden haber olvidado el diálogo final, el cual por si las moscas acá se los dejo;



Bueno, ahí está el epitafio, o parte, de la tumba de Billy Wilder. Supongo que la construcción de esa línea vendrá acompañada de las producciones que concrete, de los textos que escriba, de las obras que presente. Supongo que vendrá como un suspiro en el aburrimiento, en el ocaso de una idea que nada tiene que ver con los epitafios. I´m a writer but then nobody´s perfect.